Viajeros del silencio
Bajo techo
con el mantel tendido
solo nos une la desesperación.
Un bosque sin espacios de luz
donde aprendimos a mirarnos
con la ilusión
de habernos visto alguna vez.
Transparencias
Serpiente devorándose a sí misma,
la vanidad no sirve.
En su amarillo
las hojas de este otoño envejecidas
me recuerdan
nuestros últimos días.
Dolor velado
Ramas blancas de luna
iluminan la oscuridad.
Y es mi silencio
un hondo alarido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario