jueves, 18 de febrero de 2016
Un caso común / Santiago Sylvester
Qué puedo decir de este hombre que ocupa mi lugar,
conquista los litorales
o me expulsa hacia ellos
mientras despliega un esplendor ficticio.
Escribe un poema completamente falso,
opina sin meditación
sobre cosas que ignora,
desea a una mujer que yo no amo
y se asoma a la ventana con esta ansiedad inaceptable
que yo quisiera esconder en un cajón.
Ninguno cree en el otro;
sin embargo, unidos por el cigarrrillo,
por la misma camisa
y un forma común de estar en desacuerdo,
entramos juntos a la escena
y corremos los dos contra reloj.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario